Este «dolorido sentir» que arranca en Una interpretación halla plena respuesta en la trayectoria, igualmente plena, de Joaquín Pérez Azaústre, que no escribe ni novelas de poeta ni poesía de novelista, sino que da el timbre de voz sensorialmente rítmico, a cada encuentro con el verso o con la prosa.
Pere Gimferrer
La primera vez que leí Una interpretación tenía 15 años y me sentí deslumbrada. En la actualidad, siento aún más profundidad al releerlo detenidamente. Nos encontramos ante un poemario valiente y de una sensibilidad extraordinaria en el que el autor adopta una mirada femenina y la sitúa en uno de los momentos más difíciles de nuestra historia: la Guerra Civil.
Ana Castro
El inolvidable primer poemario de Joaquín Pérez Azaústre renace, se hace carne de nuevo, prende ante nuestros ojos asombrados y descubrimos de nuevo nuestra fiesta de huérfanos que sueñan con el mar. Feliz aniversario, Una interpretación. Per molts anys, Joaquín. No olvides nunca tomarnos de la mano con tu pluma y seguir invitándonos a bajar la cuesta de la luz.
Raquel Lanseros